De empezar recibiendo instrucciones por teléfono de mi mamá
para hacerle a mi esposo una sopa de fideo, he pasado por muchas etapas en la
cocina.
En muchas de estas épocas he tenido ayuda de excelentes
cocineras que me ayudaron a sortear el día
a día para atender a mis hijos y para poder trabajar.
Finalmente llego a una etapa en mi vida en que mis hijos se
han casado, me mudo a una casa más pequeña y prescindo del servicio a diario
para poder ser dueña de mi cocina y disfrutar cocinando.
Aprovecho para buscar mis recetarios, probar recetas nuevas,
agasajar a mi familia cuando viene a comer
una vez a la semana.
Tomo unas clases de repostería...
Pero el día a día se empieza a volver tedioso sobre todo
porque Lalo mi esposo, no es fan de comer. A él le da lo mismo una
sopa que otra y prefiere la carne magra asada y sin adornos...
Entonces decido comprarme mi Thermomix! Para facilitarme y
hacerme más creativa en el día a día y sobre todo para entretenerme mucho en
esta etapa donde tengo algunas otras actividades y 7 nietos.
Hace dos semanas llegó a casa y despues de las dos
demostraciones ya quería yo empezar con todo!
Después de innovar decidí empezar la primera semana con las
recetas guiadas y probadas de mi Libro Basico e hice la crema de poblano, la de
champiñones sin crema para que fuera más ligera y el 23 de marzo festejé mi
cumpleaños con la Tinga de Pollo.
El año pasado me habían regalado la maquina para hacer pasta
y por primera vez logré que me saliera sin pegarse con la receta del libro
básico de Thermomix! Sigo practicando el corte y el secado ideal, pero por lo
pronto la textura de la masa ya quedó! 😊
